Juego enfermo

Cuando inicié la universidad, los maestros me atormentaban con sus “dinámicas” de presentación (a los demás también los obligaban a hacerlas, pero ellos hasta parecían disfrutarlo), ya saben: decir como se llaman, de que escuela vienen y esas pendejadas. Hubo un maestro que, cuando nos impuso esa tortura nos aclaró que si alguien nos hacia una pregunta podríamos decidir si la contestábamos o no. Todo transcurrió como lo tenía pensado, pero cuando llegó mi turno, expliqué que era nuevo en la ciudad (hice esto para evitar que me hablen de calles y direcciones que no conozco, eso me encabrona a más no poder, no se por que). Cuando alguien me preguntó que si de donde venía pensé: “Mmmm…. Me dan ganas de no contestar a eso, pinche reacción pendeja que van a tener de seguro”. Todos se quedaron extrañados al negarme a contestar pero luego le encontré lo divertido al asunto…

Tiempo después la gente seguía preguntándome por mi proceder, pero ni madres, siempre decía “No quiero hablar de eso” y ponía cara como si hubiera sufrido algún trauma. Por más extraño que parezca, después la gente comenzó a especular cosas, estas son algunas de las pendejadas que me han atribuido al no saber casi nada de mi pasado:
-Soy gringo.
-Soy chilango.
-Mi idioma natal no es el español.
-Estudié en el CBTIS #122, en electrónica (y yo ni se donde está esa pinche escuela).
-Soy de Monterrey.
-Estudié y me gradué de la UTEP (University of Texas, El Paso).
-Vengo de algún otro país lejano.
-Estuve un semestre en el Tecnológico de Chihuahua #2, en sistemas.
-Soy de Sonora.

Claro no todas esas pendejadas las ideó la misma persona, es más bien lo que se ha acumulado hasta la fecha. Les recomiendo que si alguna vez tienen la oportunidad de hacer algo parecido la aprovechen, es muy divertido ver como la gente inventa cosas prácticamente de la nada y ni cuenta se dan. He aquí un ejemplo:

Maestra -Oye Alan ¿y tu no estuviste en el Tec?
Yo -Si…
Maestra -¿En donde?
Yo -……sigh, en otro lado…
Maestra –¡Ah!, en el otro lado.
Yo -¿eh?
Maestra –En la UTEP, ¿verdad?
Yo -…
Maestra –¿Y por que te viniste?
Maestro –Porque se sentía solo.
Yo –No, porque…
Maestra –¿Broncas con el dinero?
Yo –Mmm…ya me tengo que ir.