Illidure
No hace mucho, me preguntaron: ¿Cuál fue el error más grande que has cometido?. Me quedé pensando y no respondí nada, pero ahora lo sé: haber visto Illidure. Verán, Illidure es un autoproclamado cortometraje de unos tipos de aquí de Chihuahua y también fueron los peores seis minutos y catorce segundos de mi vida. Y no es que estuviera buscando ver esa desgracia, alguien me pidió que probara ese DVD (porque ahora las torturas vienen en ese formato) en mi PC o en mi Play porque ella no pudo verlo en el suyo. Grave error.
Pero comencemos irónicamente: por el principio. Se ve un cuarto/departamento pequeño/casa del infonavit en donde está un tipo dormido. Todo se ve color rojo. El tipo dormido despierta y mueve los ojos para aquí y para allá rápidamente (esto primero me creó la ilusión de que era una película cómica de principios del siglo XX, algo así como las de Chaplin. Sin duda hubiera sido mejor de esa manera). El tipo comienza a ver a su alrededor con cara de pendejo asustado. Se lava la cara. El tipo abre una puerta y pone de nuevo su cara de pendejo asustado, cierra la puerta. Una mujer disfrazada de mapache aparece detrás de él. Cuando el voltea ella desaparece. “sombras” comienzan a rodear al tipo. El tipo se tropieza y cae de forma pendeja. De nuevo aparece dormido y hace lo de los ojos. Se escucha el timbre de un teléfono. El tipo busca entre sus cosas. El teléfono sigue timbrando y el tipo se pone las manos en la cabeza y comienza a sufrir (al parecer le tiene miedo a los teléfonos). El timbre se detiene y el tipo pone su cara de pendejo extrañado (una variante, ¡Bravo!). El tipo toma un libro que dice “Vislumbres de esperanza”. El libro parece ser nuevo, de seguro él no sabe leer (y aquí hablo del personaje y del dizque actor). Se ve una dedicatoria al final del libro pero no se alcanza a leer. El tipo pone de nuevo su cara de pendejo asustado (¡de vuelta a las raíces!). Toma una foto de una mujer y la mira con atención. Se sienta en una mecedora y de nuevo todo se mueve rápido (o el tipo disfruta mucho de la mecedora o usaron de nuevo la cruel ilusión del movimiento acelerado). Se ven flashbacks del tipo preparándose un café. El tipo escupe el café y se fuma un cigarro. Un reloj con una sola manecilla avanza velozmente. El tipo mira con miedo una puerta (también le dan miedo las puertas) y trata de abrirla pero escucha un ruido y se detiene. El tipo comienza a dar vueltas con las manos en la cabeza y su Cara de Pendejo®. Se ve al tipo recostado en la cama, de nuevo hace lo de los ojos.
Eso es todo. ¿Qué puedo decir? Si esta es la nueva generación de la cinematografía mexicana las películas del futuro serán peores que las de hoy (y eso ya es decir muuuuucho). No se ustedes pero yo ya estoy hasta la madre de dizque directores de cine que se creen unos artistas incomprendidos y hacen cosas incomprensibles como este bodrio llamado Illidure. ¿Es mucho pedir una película (o más fácil: un cortometraje) que realmente cuente algo?
Ahora analicemos la caja de Illidure (ah, porque hasta se atrevieron a comprar una caja genérica para DVDs e imprimirle una portada y toda la cosa). Dice Illidure con letras bien rete artísticas (o eso pensaron) y luego dice…
Una producción de Cecilia C. Pérez y Saúl Rivera
Dirección de Saúl Rivera
Estelarizando David Alcalá (no mames ¡ES-TE-LA-RI-ZAN-DO!)
Actuación:
Jeremías es: David Alcalá. (al fin el pendejo asustadizo tiene un nombre)
Como la mano: Cecilia C. Pérez. (¿a poco creyeron que los talentos de “Cecy” se limitaban a producir cortos de pendejos? No, ¡también puede actuar como una mano! Talentosa la muchachita)
Mujer fantasma: Jessie (Poser). (Y yo que creí que era un mapache)
¡Actuaciones increíbles! ni un momento, es más, ni por una milésima de segundo alguien se va a creer estas actuaciones, todo parece sacado del recital del 10 de Mayo de cualquier primaria. No, estoy exagerando, las actuaciones en Illidure son tan pinche feas que hasta un Muppet podría ser la estrella.
Así que ya saben, si quieren seguir disfrutando de la vida jamás, JAMÁS vean Illidure. Lo bueno de esto es que tenemos los nombres de los culpables y podemos mentarles la madre: Chinguen a su puta madre “Staff” de Illidure.
Pero comencemos irónicamente: por el principio. Se ve un cuarto/departamento pequeño/casa del infonavit en donde está un tipo dormido. Todo se ve color rojo. El tipo dormido despierta y mueve los ojos para aquí y para allá rápidamente (esto primero me creó la ilusión de que era una película cómica de principios del siglo XX, algo así como las de Chaplin. Sin duda hubiera sido mejor de esa manera). El tipo comienza a ver a su alrededor con cara de pendejo asustado. Se lava la cara. El tipo abre una puerta y pone de nuevo su cara de pendejo asustado, cierra la puerta. Una mujer disfrazada de mapache aparece detrás de él. Cuando el voltea ella desaparece. “sombras” comienzan a rodear al tipo. El tipo se tropieza y cae de forma pendeja. De nuevo aparece dormido y hace lo de los ojos. Se escucha el timbre de un teléfono. El tipo busca entre sus cosas. El teléfono sigue timbrando y el tipo se pone las manos en la cabeza y comienza a sufrir (al parecer le tiene miedo a los teléfonos). El timbre se detiene y el tipo pone su cara de pendejo extrañado (una variante, ¡Bravo!). El tipo toma un libro que dice “Vislumbres de esperanza”. El libro parece ser nuevo, de seguro él no sabe leer (y aquí hablo del personaje y del dizque actor). Se ve una dedicatoria al final del libro pero no se alcanza a leer. El tipo pone de nuevo su cara de pendejo asustado (¡de vuelta a las raíces!). Toma una foto de una mujer y la mira con atención. Se sienta en una mecedora y de nuevo todo se mueve rápido (o el tipo disfruta mucho de la mecedora o usaron de nuevo la cruel ilusión del movimiento acelerado). Se ven flashbacks del tipo preparándose un café. El tipo escupe el café y se fuma un cigarro. Un reloj con una sola manecilla avanza velozmente. El tipo mira con miedo una puerta (también le dan miedo las puertas) y trata de abrirla pero escucha un ruido y se detiene. El tipo comienza a dar vueltas con las manos en la cabeza y su Cara de Pendejo®. Se ve al tipo recostado en la cama, de nuevo hace lo de los ojos.
Eso es todo. ¿Qué puedo decir? Si esta es la nueva generación de la cinematografía mexicana las películas del futuro serán peores que las de hoy (y eso ya es decir muuuuucho). No se ustedes pero yo ya estoy hasta la madre de dizque directores de cine que se creen unos artistas incomprendidos y hacen cosas incomprensibles como este bodrio llamado Illidure. ¿Es mucho pedir una película (o más fácil: un cortometraje) que realmente cuente algo?
Ahora analicemos la caja de Illidure (ah, porque hasta se atrevieron a comprar una caja genérica para DVDs e imprimirle una portada y toda la cosa). Dice Illidure con letras bien rete artísticas (o eso pensaron) y luego dice…
Una producción de Cecilia C. Pérez y Saúl Rivera
Dirección de Saúl Rivera
Estelarizando David Alcalá (no mames ¡ES-TE-LA-RI-ZAN-DO!)
Actuación:
Jeremías es: David Alcalá. (al fin el pendejo asustadizo tiene un nombre)
Como la mano: Cecilia C. Pérez. (¿a poco creyeron que los talentos de “Cecy” se limitaban a producir cortos de pendejos? No, ¡también puede actuar como una mano! Talentosa la muchachita)
Mujer fantasma: Jessie (Poser). (Y yo que creí que era un mapache)
¡Actuaciones increíbles! ni un momento, es más, ni por una milésima de segundo alguien se va a creer estas actuaciones, todo parece sacado del recital del 10 de Mayo de cualquier primaria. No, estoy exagerando, las actuaciones en Illidure son tan pinche feas que hasta un Muppet podría ser la estrella.
Así que ya saben, si quieren seguir disfrutando de la vida jamás, JAMÁS vean Illidure. Lo bueno de esto es que tenemos los nombres de los culpables y podemos mentarles la madre: Chinguen a su puta madre “Staff” de Illidure.
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